Resiliencia en la adolescencia pdf
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La resiliencia se basa en tres puntos de conexión principales o “pilares”: la escuela, el hogar y el deporte/trabajo. Con una conexión más fuerte se consigue una mayor resiliencia u otra definición: “La capacidad de superar los momentos difíciles de forma saludable”. En este artículo veremos cómo construir los pilares que refuerzan la resiliencia en los adolescentes.
La conexión es la clave. Por favor, vea cómo hacer amigos para obtener más información sobre cómo hacer la conexión con los demás. Uno de los mejores libros que leí sobre este tema de la resiliencia fue el libro Grit de Angela Duckworth. Libro aquí. Charla Ted aquí. Su libro es un estudio científico sobre lo que crea la resiliencia, y las dos principales conclusiones de su estudio y de otros estudios nacionales son: la conexión y el establecimiento de un objetivo en el que se trabaja todos los días, pase lo que pase. Creo que hay que hablar más de los objetivos.
Los objetivos no tienen que ser tan serios. Simplemente tienen que estar vinculadas a algo que quieres. Zig Ziglar (orador motivacional) solía decir: “Tener la sensación de que el futuro será mejor crea mucha esperanza”. Otra de sus frases favoritas era: “Un objetivo bien fijado es la mitad del camino recorrido”. Los objetivos crean una imagen de lo que uno cree que puede ser la vida en el futuro. Los objetivos crean una sensación de “control”, que es la clave de la resiliencia: centrarse en lo que se puede controlar. Me recuerda a la Oración de la Serenidad que tuvimos que aprender en la escuela.
Falta de resiliencia en los jóvenes adultos
Los contratiempos, los problemas y los fracasos son una parte inevitable de la vida. A medida que su hijo adolescente madura y asume más retos, experimentará más frustraciones y complicaciones. Enseñar a tu hijo a ser resiliente -la capacidad de recuperarse, adaptarse y seguir adelante- le ayudará a sobresalir en la vida, tanto personal como profesionalmente.
Navegar por los difíciles años de la adolescencia puede ser duro: es un periodo de cambios significativos, tanto físicos como mentales y de experiencia. Cada semana trae consigo nuevas oportunidades y retos que pueden suponer nuevos problemas que superar.Ayudar a tu hijo a desarrollar la resiliencia puede dotarle de las herramientas necesarias para reducir el impacto de las situaciones negativas
Para que su hijo sea resiliente, tendrá que sentirse cómodo con sus sentimientos y ser capaz de expresarlos adecuadamente. Ayúdele a entender que es él quien controla sus emociones y pensamientos, y no al revés. He aquí algunos consejos útiles:
Todos tenemos impulsos para hacer y decir cosas cuando nos sentimos enfadados, molestos o frustrados. Esto es normal y desarrollar la resiliencia no significa frenar sus impulsos. Por el contrario, se trata de aprender a no actuar según esos impulsos inútiles. Prueba este proceso de cuatro pasos con tu hijo adolescente:
Cómo promover la resiliencia en la adolescencia
Para muchos niños, el año pasado supuso un trastorno a gran escala, ya que la pandemia afectó prácticamente a todos los aspectos de su vida cotidiana. Y aunque “los cuidadores no siempre pueden alterar las circunstancias de los niños o protegerlos de las molestias, pueden ofrecer un regalo más duradero: herramientas para gestionar la adversidad”, escribe la terapeuta y consejera escolar Phyllis L. Fagell para The Washington Post.
Pero está claro que los educadores también desempeñan un papel esencial a la hora de ayudar a los niños a desarrollar la determinación y la capacidad de perseverar a través de circunstancias difíciles en la escuela y en la vida, este año y en cualquier momento.
Cuando los educadores ayudan a los alumnos a “cultivar un enfoque de la vida que considera los obstáculos como una parte fundamental del éxito, les ayudamos a desarrollar la resiliencia”, escribe Marilyn Price-Mitchell, psicóloga del desarrollo y autora. “La resiliencia no es un rasgo genético. Se deriva de la forma en que los niños aprenden a pensar y actuar cuando se enfrentan a obstáculos grandes y pequeños.” Cuando los adultos en la vida de los niños -cuidadores, profesores, entrenadores- ayudan a los jóvenes a desarrollar la resiliencia, les ayuda a “salir de las experiencias difíciles con un sentido positivo de sí mismos y de su futuro”, dice Price-Mitchell.
Cómo fomentar la resiliencia en un niño sensible
Es imposible saber con exactitud qué pruebas y desafíos les deparará la vida, pero hay medidas que puedes tomar para dotar a tus hijos de las habilidades que necesitan para superar esos obstáculos. He aquí algunas actividades que no sólo ayudan a fomentar la resiliencia en los niños, sino que también proporcionarán a tus hijos una tarde de diversión.
Enfrentarse a la adversidad puede crear algunos momentos difíciles para los niños, pero si están preparados, saldrán del otro lado mucho más fuertes. Como líder de las Girl Scouts y madre, he pasado el último año trabajando en habilidades de liderazgo con las jóvenes de mi tropa, y muchas de las actividades que hemos realizado implicaban el desarrollo de la autoestima, el fortalecimiento de las relaciones y la amabilidad, todos ellos aspectos importantes para ser resilientes.
Tanto si tu vida es bastante fácil como si está llena de obstáculos, siempre llega un momento en el que tus hijos lo pasarán mal por razones que escapan a tu control, como una mudanza, tener que lidiar con matones, problemas en la escuela o una muerte en la familia. Jugar y realizar actividades que fomenten la resiliencia les prepara mejor para cuando surjan esos momentos.