Terapia cognitivo-conductual para los trastornos de ansiedad una actualización de la evidencia empírica
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Los tratamientos psicológicos (también conocidos como terapias de conversación) pueden ayudarle a cambiar sus patrones de pensamiento para que pueda mantener su ansiedad bajo control y reducir las preocupaciones irracionales. Hay varios tipos de tratamientos psicológicos eficaces para la ansiedad, así como diferentes opciones de administración. Algunas personas prefieren trabajar individualmente con un profesional, mientras que otras sacan más provecho de un entorno grupal. También hay un número creciente de programas en línea o terapias electrónicas.
Terapia cognitivo-conductual (TCC) La TCC es un tratamiento psicológico estructurado que reconoce que la forma en que pensamos (cognición) y actuamos (comportamiento) afecta a la forma en que nos sentimos. La TCC consiste en trabajar con un profesional (terapeuta) para identificar los patrones de pensamiento y comportamiento que aumentan la probabilidad de padecer ansiedad o que impiden mejorarla. Una vez que hayas reconocido los patrones poco útiles que contribuyen a tu ansiedad, puedes hacer cambios para sustituirlos por otros nuevos que reduzcan la ansiedad y mejoren tus habilidades de afrontamiento. Por ejemplo, es posible que te encuentres atrapado en patrones de pensamiento catastrofistas. Esto significa pensar en lo peor, creer que algo es mucho peor de lo que realmente es, o anticipar que las cosas irán mal. La TCC le ayuda enseñándole a pensar de forma más realista y a centrarse en la resolución de problemas. Si evita activamente las situaciones o cosas que le causan ansiedad, la TCC puede ayudarle a enfrentarse a sus miedos y a abordar esas situaciones de forma más racional. Los profesionales pueden utilizar una serie de técnicas en la TCC. Algunos ejemplos son: La TCC puede impartirse de forma individual con un profesional, en grupos o en línea (véase las terapias electrónicas, más adelante). La TCC suele combinarse con la terapia conductual. NewAccess es un servicio gratuito y confidencial que ofrece apoyo en forma de coach. El programa incluye seis sesiones gratuitas adaptadas a sus necesidades individuales. El coaching NewAccess sólo está disponible en algunas zonas del país.
Desafiar los pensamientos negativos
¿Qué es la ansiedad? La ansiedad es un estado de inquietud en la mente y el cuerpo. Cada persona percibe la ansiedad de forma diferente, pero normalmente implica ciertos patrones de pensamiento (“¿y si…?” o “no me siento ‘bien'”). Algunas personas tienen recuerdos intrusivos o pesadillas sobre acontecimientos traumáticos ocurridos en el pasado. Algunas personas experimentan patrones de pensamiento obsesivo que les resultan perturbadores. Les resulta muy difícil detener estos patrones de pensamiento, si es que pueden detenerlos. Además, muchas personas sienten ansiedad en el cuerpo (por ejemplo, tensión muscular, aceleración de los latidos del corazón, respiración superficial, enrojecimiento facial, cambios digestivos, etc.).
La ansiedad no siempre es mala. Una cierta cantidad de ansiedad puede ser útil en el sentido de que puede ser una pista para que una persona tome medidas para mejorar su rendimiento en una tarea como hablar en público o hacer un examen, o puede servir para motivar a una persona a tomar una acción o una decisión.
Un exceso de ansiedad puede impedir que una persona viva la vida que desea. A veces, cuando una persona percibe que su nivel de ansiedad es muy alto, empieza a elegir evitar las situaciones que parecen provocar ansiedad o realiza conductas compulsivas (o rituales mentales) para disminuir la ansiedad. Cuanto más se involucra una persona en estos rituales y/o evita las situaciones que le provocan ansiedad, más pierde la confianza y su capacidad natural de saber cuándo las situaciones y los pensamientos no representan un peligro real; vive en un ciclo de miedo y evitación (y a veces de ritualización). Con el tiempo, la vida se hace más pequeña, menos agradable, y la persona puede sentirse triste o deprimida.
Terapia para la ansiedad
El trastorno de ansiedad social (TAS) suele tratarse con terapia cognitivo-conductual (TCC), una forma de terapia que fue pionera en la década de 1960 para el tratamiento de la depresión. En la actualidad es un tratamiento líder para muchas afecciones, incluidos los trastornos de ansiedad. Las investigaciones han demostrado que la TCC es una terapia eficaz para el trastorno de ansiedad social.
La TCC utiliza una combinación de técnicas que pueden variar en función del trastorno que se esté tratando. Por ejemplo, la TCC para la depresión será diferente de la TCC para el TAS u otros trastornos de ansiedad. Dado que hay tantas técnicas diferentes, es importante buscar un terapeuta que tenga experiencia con las técnicas más eficaces para tratar el TAS.
Uno de los objetivos centrales de la TCC es identificar las creencias y los patrones de pensamiento irracionales y sustituirlos por otros más realistas. Los pensamientos, las emociones y los comportamientos están relacionados. Al identificar los pensamientos inútiles, puede cambiar su forma de sentir y comportarse.
Las sesiones de terapia con TCC pueden parecerse a la relación entre un alumno y un profesor. El terapeuta desempeñará el papel de profesor, esbozando conceptos y ayudándole en el camino del autodescubrimiento y el cambio. También se le asignarán tareas para casa que son fundamentales para progresar.
La TCC puede adoptar muchas formas y suele adaptarse a las necesidades de cada cliente. Sin embargo, los terapeutas utilizan algunos enfoques constantes. A continuación se enumeran algunos tipos comunes de terapia y técnicas que una persona puede encontrar mientras participa en la TCC.
La psicoterapia interpersonal (IPT) es una forma de psicoterapia “limitada en el tiempo” que, en unas pocas sesiones, trata de identificar los problemas interpersonales que están causando malestar psicológico y desarrollar un plan de acción para abordar el origen de estos problemas7. Este modelo sostiene específicamente que los problemas interpersonales (por ejemplo, las dificultades con un jefe, la pelea con un miembro de la familia) pueden estar relacionados con los síntomas psicológicos. En consecuencia, los terapeutas que utilizan la TIP tratan de aliviar los síntomas problemáticos, dotar a los clientes de habilidades interpersonales para ayudarles en su situación actual y potenciar las fuentes de apoyo social del cliente. De este modo, la TPI mejora la experiencia del cliente con su trastorno, al tiempo que le proporciona habilidades del mundo real que le ayudan a abordar los problemas que tiene.