Que es la resiliencia

Teoría de la resiliencia

La resiliencia es lo que da a las personas la fuerza psicológica para afrontar el estrés y las dificultades. Es la reserva mental de fuerza a la que las personas son capaces de recurrir en momentos de necesidad para salir adelante sin desmoronarse. Los psicólogos creen que las personas resilientes son más capaces de manejar la adversidad y reconstruir sus vidas después de una lucha.

Afrontar el cambio o la pérdida es una parte inevitable de la vida. En algún momento, todo el mundo experimenta distintos grados de contratiempos. Algunos de estos desafíos pueden ser relativamente menores (no entrar en una clase que querías tomar o ser rechazado para un ascenso en el trabajo), mientras que otros son desastrosos a una escala mucho mayor (huracanes y ataques terroristas).

La forma de afrontar estos problemas puede desempeñar un papel importante no sólo en el resultado, sino también en las consecuencias psicológicas a largo plazo. La buena noticia es que hay cosas que se pueden hacer para ser más resistentes.

Las personas que mantienen la calma ante un desastre tienen lo que los psicólogos llaman resiliencia. Las personas resilientes son capaces de utilizar sus habilidades y puntos fuertes para afrontar y recuperarse de los problemas y desafíos. Estos problemas pueden ser:

Centro de resiliencia de Estocolmo

En física, la resiliencia es la capacidad de un material elástico (como el caucho o el tejido animal) de absorber energía (por ejemplo, de un golpe) y liberarla al volver a su forma original. La recuperación que se produce en este fenómeno puede considerarse análoga a la capacidad de una persona para recuperarse tras un revés. La palabra resiliencia deriva del participio presente del verbo latino resilire, que significa “saltar hacia atrás” o “retroceder”. La base de resilire es salire, un verbo que significa “saltar” y que también aparece en las etimologías de palabras tan ágiles como sally y somersault.

Lee más  Cómo puedes cuidar tu sentido del olfato

Apretó la goma con una pinza y luego la soltó, demostrando con este experimento dolorosamente sencillo que el material perdía su resiliencia y, por tanto, su capacidad de flexión lo suficientemente rápido como para proteger la articulación del cohete de los tumultuosos gases calientes.

Es realmente maravilloso el grado de resiliencia de la naturaleza humana. Si se elimina cualquier causa de obstrucción, sea cual sea, incluso con la muerte, volvemos a volar a los primeros principios de esperanza y disfrute.

El trauma de la resiliencia

El Dr. Ginsburg, pediatra infantil y experto en desarrollo humano, propone que hay 7 componentes integrales e interrelacionados que conforman el ser resiliente: competencia, confianza, conexión, carácter, contribución, afrontamiento y control. Cada una de estas 7 C’s se explican brevemente aquí y en nuestro programa de grupo de resiliencia infantil y juvenil, nuestras sesiones han sido elaboradas cuidadosamente para incluir contenidos y procesos de grupo que potencien todas y cada una de las 7 C’s.

1. Competencia – es la capacidad de saber cómo manejar situaciones estresantes de manera efectiva. Requiere tener las habilidades para afrontar los retos, y haber tenido la oportunidad de practicar el uso de estas habilidades para sentirse competente a la hora de afrontar las situaciones. Nuestros grupos ofrecen entrenamiento en reducción de estrés y habilidades sociales y al aprender estas habilidades en un grupo de compañeros de edad similar, proporciona la oportunidad para que su hijo practique estas habilidades, y mejore su competencia.

2. La confianza – es la creencia en las propias habilidades y está arraigada en la competencia. Los niños adquieren confianza al ser capaces de demostrar su competencia en situaciones reales. Nuestros grupos mejoran la confianza en sí mismos identificando los puntos fuertes de cada niño y, cuando los niños se fijan en sus puntos fuertes, ven cómo se elevan y se automotivan para superar sus retos.

Lee más  Frases para dedicar a personas bipolares

El pensamiento de la resiliencia

La resiliencia se ha utilizado para describir a personas y sistemas que se recuperan de experiencias negativas y perturbaciones. También se ha utilizado para referirse a los sistemas que sobreviven a las sacudidas, independientemente de que vuelvan o no a donde estaban antes, o a cualquier estado estable.

Aunque algunos han argumentado que la resiliencia es un concepto vacío, el uso generalizado de la idea de resiliencia en todas las disciplinas, sectores y profesiones sugiere que es un concepto necesario. La resiliencia está relacionada con el cambio. Y dado el rápido cambio que se está produciendo en el medio ambiente, la tecnología y la sociedad, el uso tan extendido del término refleja esta necesidad.

Sin embargo, esto lleva a algunas preguntas. ¿De dónde viene la idea de resiliencia y cómo se ha desarrollado? Y lo que es más importante, ¿cómo se puede utilizar el concepto para ayudarnos a navegar por un planeta que cambia rápidamente?

Según Ann Masten, profesora de la Facultad de Educación y Desarrollo Humano de la Universidad de Minnesota, la idea de la resiliencia “surgió en la ecología y la psicología, o en las ciencias sociales, más o menos al mismo tiempo [en la década de 1970] y de forma totalmente independiente”. El hilo conductor, dice Masten, es que implica interacciones dentro y entre sistemas complejos.